Hexámetro era una de las diez palabras favoritas del idioma español para el escritor Jorge Luis Borges. Y ese fue el nombre elegido por los precursores de una nueva librería en Villa de Merlo (San Luis), abierta en diciembre de 2020 con la pandemia galopando. Se puede decir que se trató de casi un “acto revolucionario” desde lo literario. Pero, lo sorprendente no es solo la fecha de su génesis, sino también la repercusión local, provincial y nacional que ha conseguido este espacio que va más allá de la venta de libros. En veinte meses Hexámetro Libros se ha posicionado como una usina cultural y un lugar de encuentro para toda su comunidad lectora.

Para muchos artistas, escritores y lectores, Hexámetro ha funcionado como un refugio, donde las personas entran y enseguida se sienten a gusto. La calidez del espacio y los detalles, le dan identidad.

En su catálogo, se pueden hallar novelas, cuentos, ensayos, poesías, y otros géneros de editoriales independientes, que dan la posibilidad a escritoras y escritores no tan conocidos para el público conozca sus obras. Una manera de mostrar la riqueza de las letras en nuestro país; en una localidad, Villa de Merlo, que está señalada como tierra de letras. Y no es un dato menor: allí nació el poeta Antonio Esteban Agüero, una de las máximas expresiones literarias puntanas.

Este faro literario en que se ha convertido Hexámetro es la labor de sostener una densidad cultural en sus eventos, desde el primer día. Es el valor de hacer de su patio un espacio para fusionar las letras, la música, la danza, las esculturas, las pinturas y las narraciones, para que sean los propios “hexametrinos”, si se permite el gentilicio, los que se apoderen del “afuera” hacia “adentro” del movimiento cultural.

Por la librería merlina han pasado escritoras y escritores como Francisco Moulia, Fabio Lacolla, Puchi García Petrino, Luis Mey, Nuria Nuy, Debret Viana, Gustavo Menéndez, Juan Andrés Despouy, Camila Vásquez, Edgar Scott, Liliana Mainardi, entre otros. Ya sea en actividades individuales y colectivas. Hexámetro ha fomentado la lectura con talleres dedicados a la literatura francesa, norteamericana y japonesa, por citar algunos. También ha fomentado la escritura con talleres, seminarios y clínicas. Narradores y voces se han alzado en su vereda, para destacar al mundo literario. Otras actividades, como las dedicadas a la poesía a través de “Palabras al pie de la sierras”, también se han hecho presente en este tiempo.

A los eventos literarios, Hexámetro le sumó las exposiciones de arte, fotografía y escultura. Ritmos musicales tan diversos que han ido del jazz al rap, siempre teniendo como eje lo literario. Para muchos artistas, escritores y lectores, Hexámetro ha funcionado como un refugio, donde las personas entran y enseguida se sienten a gusto. La calidez del espacio y los detalles, le dan identidad.

Sus hacedores no descansan. Y para septiembre Hexámetro prepara una de grandes visitas literarias del año, que no será la única. Ya está agendada una doble sorpresa para las semanas posteriores. Un gran homenaje para su comunidad, que acompaña cada iniciativa.

Este miércoles 24 de agosto se celebra en Argentina el Día del Lector en homenaje al natalicio de Jorge Luis Borges, que en una visita en España dictó esas diez palabras preferidas. Y una fue Hexámetro. En Villa de Merlo, una librería le rinde culto a esa elección borgiana y lo hace muy bien.

*Especial por Natalia Agondi