Tratado de La Toma
Polémica decisión de Alvarez Pinto sobre el destino de los fondos provinciales para mejorar el salario de los empleados municipales
Por imposición y no por consenso. El intendente de Villa de Merlo, Juan Alvarez Pinto, decidió que los dineros que enviará el Ejecutivo Provincial para que los salarios municipales superen la línea de pobreza no será aplicado de esa forma. En la plaza Sobremonte, y ante los empleados municipales, les dio a conocer que pagará “un bono” de 120 mil pesos a todos por igual. Ya sean empleados planta permanente o contratados. Desde funcionarios a cargos políticos. Sin importar rango ni estatus. La decisión fue unilateral: "Es esto o nada. O lo cobran todos o devuelvo el dinero", dijo el intendente ante los cuestionamientos de los trabajadores.
Esta postura del Ejecutivo dejó en estado de deliberación a los empleados. La “familia municipal”, como le había llamado el intendente el día anterior antes de firmar en San Luis, el acuerdo con provincia. En ese video había prometido una solución en conjunto con los empleados, pero no fue así. Ante eso, incertidumbre. Asombro.
Alvarez Pinto y su equipo estableció que ese monto extra que enviará el Estado Provincial no se sumará a los salarios. Y será tratado como un bono. Sin embargo, el acuerdo que se firmó entre las partes establece: “Los importes que reciba el municipio(…)tendrán como único y exclusivo destino específico el pago de salarios de los agentes municipales que se encuentren por debajo de la línea de la pobreza, determinada mensualmente por el Instituto Nacional de Estadística y Censos de la República (INDEC) hasta alcanzar dicho mínimo”. Esa línea de pobreza fue estimada en agosto en casi 285.000 pesos. Además, en el mismo artículo se dictamina: “El Municipio se compromete a no variar el destino previsto en la presente cláusula, y mantener en lo sucesivo el parámetro salarial aquí previsto a los efectos de que el mismo no esté por debajo de la mencionada línea”. El municipio de Villa de Merlo no responderá a esa premisa desoyendo las cláusulas del “Tratado de La Toma”.
Hay un factor que es determinante: el número de empleados y contratados que tiene la municipalidad; cifra que siempre y bajo cualquier administración es un dato que permanece en la opacidad. A los empleados de planta permanente se suman una cantidad de personas en contratos en negros, más los asesores políticos, algunos de ellos nombrados y que tuvieron la fortuna divina de conseguir trabajo para su pareja e hijo. Esos favorecidos, también cobrarán el bono de 120 mil pesos, igual que los empleados de trayectoria y antigüedad, que hoy no llegan a percibir un salario de 300 mil pesos.
Según se pudo saber, la Municipalidad de Villa de Merlo, recibirá unos 70 millones de pesos por mes en calidad de dinero extra, que deberá ser volcado a mejorar los sueldos. Esa es la cifra que el Gobierno Provincial depositará en las cuentas municipales en concepto de “Aporte del Tesoro Provincial” (ATP); un importe equivalente al cincuenta y cinco por ciento (55%) de la porción de masa coparticipable que recibe el municipio. El tratado explica que en los meses de junio y diciembre, la provincia deberá reforzar los aportes para que el municipio pueda hacer frente “al sueldo anual complementario de su nómina de personal”. Es decir, que el tratado debería tener vigencia después de noviembre.
El intendente puso en duda esa continuidad. Se mostró escéptico al sostener: "Este gobierno (de Alberto Rodríguez Saá) dejará la provincia fundida y tendremos que ver qué pasará después del 10 de diciembre". Aunque los problemas financieros no son solo del Estado Provincial. Alvarez Pinto presentó ante los empleados un escenario de buena salud de las finanzas locales. Esa afirmación contrasta con lo que se señala ante los propios concejales y el inédito pedido ingresado al Concejo Deliberante para aumentar las tasas municipales de los próximos tres meses en un 50% y penalizar a los morosos con un 100% de interés. Ante los ediles, funcionarios dijeron que la recaudación estaba en descenso y que no había dinero.
Se espera que en las próximas horas pueda haber algún tipo de contrapropuesta por parte de los gremios. La imposición de Alvarez Pinto sobre cómo usar el ATP generó posturas contrapuestas en la propia “familia municipal”. Como el icónico escritor argentino Jorge Luis Borges solía decir: "La realidad no siempre es la que parece". Una vez más.