Derrumbe salarial
Éxodo docente y emergencia universitaria: el CIN exige una Ley de Financiamiento

La situación de las universidades públicas es crítica. Con salarios iniciales por debajo de la línea de pobreza y un presupuesto congelado que no alcanza para cubrir los gastos básicos, más de 10 mil docentes ya abandonaron sus cargos. Este jueves 26 de junio, todas las universidades del país realizarán una jornada federal de protesta para exigir la aprobación urgente de la Ley de Financiamiento Universitario, presentada el 28 de mayo por el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) ante el Congreso.
En una conferencia de prensa realizada en la sede central del CIN, las máximas autoridades del sistema universitario nacional, junto a representantes de los colectivos docentes, nodocentes y estudiantiles, denunciaron el profundo deterioro que atraviesan las instituciones de educación superior.
El presidente del CIN, Oscar Alpa, fue contundente:
“En la posibilidad de resolver el problema universitario está en juego el futuro de la nación”.
Alpa detalló el desfasaje entre los aumentos presupuestarios y la inflación, la paralización de obras, la falta de respuestas sobre becas y el recorte del financiamiento para el sistema científico. “La situación salarial es angustiante. Si esto no se modifica, tendremos dificultades reales para seguir funcionando”, advirtió. Por eso, pidió al Congreso que trate y apruebe con urgencia la ley que garantiza recursos previsibles y adecuados para las universidades públicas.
A su lado, el vicepresidente del CIN, Franco Bartolacci, remarcó:
“Este jueves 26, en cada ciudad donde haya una universidad pública, se realizarán actividades para defender el sistema y exigir la aprobación de la ley. Pedimos a la sociedad que se sume a la campaña ‘Un millón de firmas por la universidad pública’ y a los legisladores nacionales que garanticen quorum para la sesión especial prevista para el 2 de julio”.
Los datos reflejan una realidad alarmante: el 80% de los docentes universitarios tiene dedicación simple y cobra salarios inferiores a la línea de pobreza. Desde la asunción de Javier Milei, los sueldos cayeron casi un 100% en términos reales. Hoy, un profesor que recién comienza gana unos 150 mil pesos, mientras que un investigador percibe 300 mil.
Además, las universidades denuncian que están recibiendo apenas el 30% de los fondos que recibían a fines de 2023 para gastos de funcionamiento, lo que impacta directamente en servicios esenciales como comedores, residencias, bibliotecas, becas y transporte.
Durante la conferencia, representantes de CONADU, CONADU Histórica, FEDUN, CTERA, FAGDUT, UDA y FATUN, junto con la Federación Universitaria Argentina, sumaron su voz al reclamo. Todos coincidieron en que sin financiamiento no hay futuro posible para la educación pública ni para la ciencia argentina.
Alpa concluyó con una definición contundente:
“Las y los docentes y nodocentes necesitan un salario digno acorde a su labor extraordinaria; las y los estudiantes, actualización de los programas de asistencia; y la ciencia y las universidades, recursos mínimos para funcionar. Todo eso está contemplado en la ley, por eso pedimos su aprobación urgente”.
(Fuente: CIN//Diario Puntal//Infogremiales)