Villa de Merlo
Comunidad y organizaciones debatieron el futuro del agua potable: Alertan por el ahogo financiero a la cooperativa
El sábado 9 de noviembre, en el espacio cultural Amigos de Merlo, se llevó a cabo la charla “¿Agua para muchos o agua para pocos?”. Convocada por la Multisectorial del Noreste de San Luis, reunió a estudiantes, docentes, representantes de organizaciones sociales, políticos y vecinos de la región. La iniciativa surge ante la preocupación por el acceso al agua y la gestión responsable del recurso.
Villa de Merlo fue el escenario de un intenso debate en torno al futuro del agua potable en la región. Bajo el lema “¿Agua para muchos o agua para pocos?”, la Multisectorial del Noreste de San Luis organizó una charla en el espacio cultural Amigos de Merlo, el sábado 9 de noviembre. Allí, estudiantes, docentes, vecinos, agrupaciones y representantes locales se reunieron para analizar la situación actual del recurso y proyectar posibles soluciones ante los desafíos del agua en el noreste puntano.
El encuentro contó con la participación de figuras clave de la comunidad, entre ellos integrantes de la UNSL y la UNLC, la Cooperativa de Agua de Merlo y Cortaderas, y representantes de municipios y asociaciones civiles. Este diálogo buscó visibilizar la creciente preocupación ciudadana por el manejo del agua y la necesidad de transparencia en su distribución.
ORDENANZA DEL AGUA
Pablo Picco, representante de la Multisectorial, abrió la charla explicando los puntos principales de la propuesta de ordenanza del Ejecutivo Municipal. A esto se sumaron los aportes del abogado Alejandro Anania, quien abordó aspectos legales sobre el derecho al agua y la importancia de la participación ciudadana, así como las presentaciones de Magdalena Lavarello, quien expuso el uso de agua en el country Chumamaya, y de Belén Gurruchaga, quien informó sobre la situación de la Cooperativa de Agua de Merlo.
PRINCIPALES EJES DEL DEBATE
Durante el intercambio de ideas, los presentes destacaron la necesidad de democratizar la información sobre el agua para permitir una mayor participación ciudadana en la toma de decisiones. Este punto resonó especialmente cuando se discutió el proceso de privatización de los servicios en algunas localidades. Vecinos de Villa Larca, por ejemplo, informaron que se estableció un límite de 250 litros de agua por hogar, lo cual genera multas significativas al superar este tope, afectando a muchas familias.
Además, se cuestionó el consumo de agua del country Chumamaya, donde el uso de piscinas y la falta de acuerdos claros con el municipio sobre el cobro del servicio generan inquietud entre la comunidad.
ASFIXIA FISCAL
Otro de los temas que generó debate fue la situación fiscal y operativa de la Cooperativa de Agua de Merlo, que enfrenta una importante carga económica. En 2023, los costos de electricidad para el bombeo representaron un 8% del presupuesto, porcentaje que se proyecta crecerá al 33% en 2025. Este aumento pone en riesgo la operatividad de la cooperativa y refleja un contraste con el modelo de gestión empresarial, orientado al lucro y no a la distribución equitativa del agua.
REFERÉNDUM
Durante el debate, se sugirió que la nueva ordenanza sobre el agua debe incorporar una perspectiva no antropocéntrica, que valore el ciclo natural del agua y su papel ecosistémico. Asimismo, los asistentes propusieron un referéndum para que toda la comunidad tenga la oportunidad de opinar sobre el futuro del recurso.
Los participantes coincidieron en la importancia de un plan de desarrollo territorial que respete los saberes locales y controle la expansión inmobiliaria. Como ejemplo de los problemas actuales, se señaló que de las 1,221 parcelas aprobadas para urbanización entre 2015 y 2022, apenas el 8% están habitadas, pese a contar con infraestructura de agua instalada.
Un Proyecto Comunitario
Al finalizar la charla, los presentes se comprometieron a presentar ayer lunes 11 de noviembre una propuesta de ordenanza ante el Honorable Concejo Deliberante de Villa de Merlo. El objetivo es que esta iniciativa, nacida del consenso de la comunidad, promueva la conciencia ciudadana y defienda los derechos humanos, con especial atención al derecho fundamental al agua.