Economía
El Gobierno frenó otra vez los aumentos de luz, gas y combustibles para evitar un salto en la inflación
El ministro de Economía, Luis Caputo, acaba de anunciar una nueva postergación del aumento a los combustibles y las tarifas de gas y luz para evitar su impacto en la inflación.
En este caso, la suba correspondía para mejorar los márgenes de las empresas que prestan los servicios públicos regulados de transporte y distribución de energía eléctrica y gas natural, y hubieran tenido un impacto en las facturas de hogares, comercios e industrias cercano al 2-3%.
Por otro lado, Caputo definió que aplicará un incremento de impuestos a los combustibles que equivale a un impacto de 1% en la nafta y el gasoil, que será efectivo a partir del lunes 1 de julio.
Ambas medidas buscan consolidar un proceso de baja de la inflación, que se habría interrumpido en junio después de 5 meses (enero-mayo) precisamente por los ajustes de tarifas que tuvieron como objetivo bajar el gasto público en subsidios.
Entre febrero y abril, el Gobierno había firmado acuerdos con las compañías para que desistieran de reclamos judiciales y administrativos a cambio de aumentar las tarifas y mantener una fórmula de indexación mensual en base a la evolución pasada de la inflación, los salarios y el costo de la construcción. La primera vez que se tuvo que aplicar esa fórmula, en mayo, se postergó hasta junio.
Pero para junio Caputo le había ordenado al secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, cancelar ese mecanismo y empezar desde julio con una fórmula que incorpore la inflación futura proyectada para actualizar los ingresos de las empresas. (Clarín)