El salario mínimo, vital y móvil en diciembre fue de $156,000, lo que implica que, incluso si ambos adultos en el hogar trabajan, este ingreso no es suficiente para evitar la pobreza.

La Canasta Básica Alimentaria (CBA), que establece los productos mínimos para subsistir, aumentó un 30,1%, y una familia similar necesitó $240,679 para no caer en la indigencia.

Ambas canastas experimentaron un crecimiento superior al índice de inflación de diciembre, que fue del 25,5%. En el acumulado del año, la CBT aumentó un 258,2%, la CBA un 225,1%, y la inflación de alimentos alcanzó un 251,3%.

Para ser considerada de clase media en la Ciudad de Buenos Aires en diciembre, una familia necesitó un ingreso entre $745,270 y $2,384,866. Para no ser considerada pobre pero aún vulnerable, los ingresos debieron situarse entre $494,791 y $596,216 al mes.

El INDEC también informó sobre la valorización de la Canasta Básica de Crianza, que incluye los costos de consumos y cuidados para niños de 0 a 12 años. En diciembre, esta canasta varió según la edad, siendo de $197,046 para menores de un año, $233,528 para niños de 1 a 3 años, $192,988 para niños de 4 a 5 años y $242,918 para niños de 6 a 12 años.

Redacción / TN