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Valle del Sol

La primera noche fue todo un éxito

Merlinos y turistas bailaron hasta el amanecer en lo que fue la primera velada del Valle del Sol. El Balneario Municipal estuvo repleto y vivió una noche inolvidable. Bruno Arias puso el broche de oro y tocó hasta la madrugada.
sábado 06 de febrero de 2016
La primera noche fue todo un éxito

El evento comenzó alrededor de las 22 cuando uno de los conductores, Juan Carlos Christiansen dio inicio a la fiesta. Ingresó la Virgen del Rosario al predio y se ubicó al lado del escenario. La imagen fue acompañada por diferentes agrupaciones gauchas de la ciudad. De inmediato se vivió en escena la imponente apertura. Un grupo de artistas locales realizó una intro con percusión para dar lugar a la interpretación del himno a Merlo en la voz de la cantante local Débora Villalva, un ballet la acompañó bailando alrededor mientras se proyectaban imágenes de Merlo en las pantallas. Más tarde otro cantante local, Damián Juárez cantó el tema del Valle del Sol junto a Débora. El ballet y la percusión se sumaron y juntos generaron un clima emocionante.

Al llegar el momento de iniciar con la grilla de presentaciones Christiansen y Gustavo Ramos, conductores del evento, presentaron al ganador del Pre Festival en la categoría solista vocal masculino. German Marco y el Chino Serrano se fusionaron bajo el nombre Marco Serrano y desplegaron su talento en escena. El grupo oriundo de Villa del Rosario, Córdoba tocó algunos temas de su primer disco grabado íntegramente en Merlo en los estudios Lampalagua y anticiparon algo de lo que será su próximo material. Pese a la noche fresca y húmeda la gente comenzó a llegar desde temprano al predio que poco tardó en estar repleto. Muchos de ellos enseguida buscaron su pareja de baile y comenzaron a volar de un lado al otro por el predio.

Luego fue el turno de Agustín Lionel que interpretó algunas sambas y chacareras, seguido de Cristian Díaz. Posteriormente el primer ballet pisó el escenario, los chicos de Grito de mi Tierra se destacaron una vez más con una presentación de gran nivel. Dejaron el escenario a punto justo para que los siga Ezequiel Amaya y ponga a bailar a todos con grandes clásicos. Luego fue el turno del Ballet Inkillay. Un momento emotivo se vivió cuando fue proyectado un video con imágenes de las raíces de Merlo. Allí se lo vio a Javier Báez hablar sobre Tito Batista, un personaje histórico de la ciudad.

PETECO CARABAJAL

Pocos minutos después de la una de la madrugada subió al escenario Peteco Carabajal. Su show fue ante una enorme multitud. El comienzo, como acostumbra, fue tranquilo y con temas del nuevo material. Luego dio lugar a los grandes clásicos como “Las manos de mi madre”, “La estrella azul”, “La mazamorra”, un poema de Antonio Esteban Agüero, “Mataca Ollera” un clásico con su violín, entre otras. Peteco recordó con mucho amor su primera visita a Villa de Merlo en el año 79. Desde entonces no ha dejado de visitar la ciudad. El cierre fue tras una hora de show con “El puente carretero” tocando el violín entre el público que enloquecido trataba de ver de cerca al artista. 

El ballet Grupo Tierra fue quien siguió en escena con su propuesta “Piel de Barro”. Un show que generó mucha expectativa y finalmente sorprendió a todos. Se distinguió por la buena energía, la gran producción que tuvieron para la presentación que tiñó de color el escenario. Fue un show introspectivo y muy emocionante con una interesante fusión musical. Promediando la noche llegaron Los Coyuyos con su folklore bien tradicional y varios clásicos para interpretar. Luego estuvieron Los de la Peña que con su típico show festivalero dejaron al público listo para recibir el show del cierre.

BRUNO ARIAS

Poco después de las 3:30 de la madrugada Bruno Arias llegó feliz al escenario junto a su banda de talentosísimos músicos y amigos. Su presentación comenzó con “Changuito voz de urpila”, uno de sus clásicos. En una presentación que duró casi dos horas tocaron ticu, saya, bailecito y toda la música típica del norte argentino. Fue un show que emocionó y alegró a todos los que se quedaron hasta el final. En varios temas fue acompañado por el ballet Newen de Santiago del Estero. En los últimos temas Bruno invitó a la cantante local Débora Villalva a interpretar “Sol de los andes”, una saya junto a un grupo de caporales que bailaban en el escenario. Su despedida fue con el “Humahuaqueño”. Antes de irse Arias afirmó que planea volver a Merlo para dar charlas a músicos locales.

 

   

   

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