Otro domingo en el que se madrugó gustosamente para disfrutar de una jornada en la naturaleza. Muy temprano salimos desde Villa de Merlo, siempre acompañando al guía de trekking Germán Romero. Esta vez compartimos la aventura con un grupo de turistas de La Falda que viajaron exclusivamente para la excursión.

El ascenso al Filo serrano lo hicimos en los autos, cruzamos el límite interprovincial con Córdoba y por el camino de ripio avanzamos para dejar los vehículos cerca del puesto El Tono. Poco antes de las 8:30 empezó el trekking.

La primera parada fue en el Sato del Tigre que lo rodeamos, hasta llegar al lado de la hoya. Ahí nos acomodamos para desayunar y compartir unos mates antes de seguir.

Poco después cruzamos el arroyo para dirigirnos hasta la cumbre del Cerro Áspero. El trayecto fue con panorámicas sorprendentes del Valle de Calamuchita y las Sierras de los Comechingones.

Luego de algunos minutos de trekking, charlas y anécdotas, llegamos a la cruz que marca el punto más alto del Cerro Áspero. Unos 1986 msnm. El imponente cerro es dueño de unas vistas 360° únicas que maravillaron a todo el grupo. Con sonrisa de cumbre, nos sentamos en las piedras durante algunos minutos para disfrutar del paisaje.

Antes del mediodía seguimos avanzando al siguiente objetivo. Ahora tocaba descender hasta el Pueblo Escondido por la sierra, hasta llegar al camino de Los Caracoles. Luego de algunos minutos llegamos a distinguir el Pueblo, los senderos y el camino de los Pinos por el que descendían motos y camionetas 4x4. Aun nos separaban varios metros de desnivel que bajar, por un camino lleno de piedras sueltas y redondeadas que obliga a mantener la vista atenta en el suelo. 

En el trayecto hicimos parada obligada para entrar en la bocamina superior del Pueblo. Una mina abandonada allá por el 69´, donde es importante moverse con cuidado, ya que carece de mantenimiento y presenta un desgaste de mucho tiempo. Hay pozos, respiraderos y piedras en el piso que hacen que cada movimiento ahí dentro requiera de total atención y silencio para evitar movimientos indeseados.

En el corazón del Cerro, Germán nos explicó parte del funcionamiento de la mina y la forma en la que los mineros trabajaron entre 1895 y 1969 extrayendo wolframio en forma de óxido y de sales, que sirvió para la exportación durante la segunda guerra mundial. Era usado para las armas.

Tras la aventura dentro del cerro, seguimos descendiendo hasta el Pueblo Escondido en busca de algo rico para el almuerzo y una cerveza fresca para compartir.

Después del brindis y una rica comida compartida al solcito en el Pueblo, al pie del Cerro Áspero, empezamos el trekking de regreso a los autos.

Contactos

Germán Romero - Guía de trekking profesional AAGM/UNC (Guía de Trekking de la Asociación Argentina de Guías de Montaña – Universidad Nacional de Córdoba) prestador de turismo alternativo habilitado en riesgo medio y riesgo alto. Socorrista en zonas agrestes.
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