En la actualidad, los beneficiarios deben probar su propia supervivencia ante el banco que les abona la jubilación. El trámite se suspendió desde marzo del 2020, por la pandemia de coronavirus, pero se reinstauró a partir de este mes.

“El trámite de supervivencia o fe de vida es para evitar el fraude, para que un familiar no cobre el beneficio si el jubilado murió. Durante la pandemia, estuvo suspendido el trámite y no aumentó el porcentaje de fraude: se mantuvo en la misma línea, acreditando o no la supervivencia”, explicó la abogada previsionalista Luciana Squizziato.

Por disposición de ANSES, los bancos retomaron la solicitud del trámite, aunque pueden incorporar herramientas tecnológicas para que se completen. “El jubilado que tienen buen manejo del celular ingresa a la página web o la aplicación del banco, selecciona la acción fe de vida, que pide foto del dni y foto de su rostro. Es tan preciso lo de los datos biométricos que por ahí se hace complicado”, detalló la letrada,

Algunas entidades permiten que el trámite se pueda hacer desde el homebanking de un tercero (familiar) para facilitarlo. En el caso de las personas con imposibilidad de movilizarse o menores de edad, los representantes son quienes deben tramitar la fe de vida ante la Policía.

Todos los meses, ANSES deposita en los bancos los beneficios correspondientes a los jubilados que cobran en esa entidad. Si el banco pagara a un beneficiario fallecido, deben hacerse cargo de ese monto. “Por eso no se arriesgan y la piden”, sostuvo Squizziato.

A nivel nacional, solo tres bancos no piden la “fe de vida”: Banco Provincia de Buenos Aires, Banco de Córdoba, y Banco de La Pampa. En todos los casos, argumentaron que el acceso a la información de sus sistemas les permite conocer al momento si se produce la muerte de un beneficiario y cancelan el pago de manera inmediata.

“Tres días antes de la fecha de cobro se tiene que hacer el trámite para que pueda cobrar. Si no lo hacen, la plata se deposita en el banco hasta la fecha de vencimiento de pago, es un plazo de 20 días. Vencida esa fecha, si no dio la fe de vida la plata se devuelve a ANSES. Se puede recuperar con un trámite que se llama repago, que demora unos 60 días”, especificó la abogada. (SANLUIS24.COM.AR)