Villa Dolores: el municipio replica que la tragedia del desagüe "se usó políticamente

La intendenta Gloria Pereyra marcó su posición sobre el caso de la muerte, en julio pasado, de dos obreros municipales durante una obra pública.

A casi un mes de la muerte de dos trabajadores municipales que fueron sepultados por un derrumbe en Villa Dolores, la intendente Gloria Pereyra habló esta semana y dijo lamentar que el tema se hubiese usado “políticamente”.

Se refería al apoyo que los familiares de las dos víctimas recibieron de miembros de la oposición en reclamos que se hicieron mediante marchas por el centro de la ciudad.

La fiscal del caso, Eugenia Ferreyra, no descartó que hubiese nuevas imputaciones, que se sumen a las tres existentes, que alcanzan a profesionales vinculados con la obra pública que se realizaba. Familiares de las víctimas afirman que la obra no cumplía con los requerimientos de seguridad para los operarios. El siniestro se produjo el martes 16 de julio a las 18.

Cuando trabajaban a cuatro metros de profundidad, en una obra situada en pleno centro de la ciudad, dos operarios fueron cubiertos por un desmoronamiento de arena y piedras. Norberto Orlando Romero (44) fue extraído sin vida del lugar.

Damián Altamirano (23) fue rescatado y reanimado, quedó en gravísimo estado en el hospital Villa Dolores, pero murió cinco días después a causa de las heridas y de la asfixia sufridas. Familiares de ambos marcharon dos veces este mes por el centro de la ciudad reclamando Justicia, y el esclarecimiento de los hechos.

La causa está calificada como homicidio culposo agravado por la multiplicidad, delito que prevé una prisión de dos a cinco años, e inhabilitación especial, para quien sea encontrado responsable del mismo.

Por ahora, los imputado son el asesor técnico de la obra, el ingeniero civil Jorge Hanisch, el encargado, ingeniero en construcciones Mario Bernáldez, y el Secretario de Obras Públicas del municipio, Aldo Zanitti.

Mientras, la Justicia espera un informe del área Cymat (Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo) del Gobierno de Córdoba sobre la situación, y otros peritajes. La obra fue clausurada a los pocos días del derrumbe.

DUELO

“No hablé este mes porque estaba viviendo un duelo, por la muerte de dos compañeros de trabajo, yo mismo les había ofrecido trabajo a ellos” dijo la intendenta Gloria Pereyra a la prensa, luego de cuatro semanas de no abordar el tema públicamente. Y agregó: “Lamento mucho que se haya usado políticamente el dolor de las dos familias” en alusión a las críticas que había recibido por su silencio, y al apoyo de la oposición a los familiares de los fallecidos.

Pereyra, quien fue reelecta el 31 de marzo y asumirá en diciembre su segunda gestión, agregó: “Estuvimos junto a las dos familias desde el primer momento, no es cierto que nos hayamos desentendido de nuestra responsabilidad”.

Dijo además que confía en la Justicia, y que la obra por ahora interrumpida se continuará en el futuro mediante un llamado a licitación, y no por gestión directa, como se venía realizando. Agregó también que en adelante, todas las obras municipales contarán con la supervisión del colegio de ingenieros, asumiendo que el desagüe en cuestión no contaba con ese aval.

En dos manifestaciones realizadas, familiares de las víctimas afirmaron que los operarios no contaban con las medidas de seguridad correspondientes, y que ya habían sucedido derrumbes de menor magnitud con heridos. También, mediante pancartas, pedían que la intendente “de la cara”.

La obra interrumpida consiste en un ducto subterráneo que une la plaza principal de la ciudad con el Río de los Sauces. El objetivo es reducir la cantidad de agua que se reúne en el centro en los días de lluvia. En la zona, el suelo es permeable, con alta presencia de piedra y arena.

(Fuente: La Voz)