Máximo reconocimiento provincial a dos merlinos

Ubicados en la primera fila de un auditorio armado para la ocasión, en la Torre I de Terrazas del Portezuelo, los ocho puntanos que representaron a San Luis y el país en la RoboCup 2016, y los cinco jóvenes que hicieron lo propio durante el Campeonato Argentino de Ajedrez, recibieron este jueves la máxima distinción que otorga la Provincia de San Luis: el premio Pueblo Puntano de la Independencia, otorgado a quienes hayan realizado actos de engrandecimiento para con San Luis.

Es que durante la primera semana de julio, Ezequiel Córdoba, Lucas Orozco, Federico Cravero y Agustín Mazza (integrantes de Iron Fénix Team) junto a Juan Fernández, Guido Queiroz, Maximiliano Guerrido Otín y Lihuén Cabrera (miembros de ULP Robotics), regresaron de Leipzig, Alemania, con el segundo puesto de la competencia, lo que convirtió a los jóvenes de 16 y 17 años en receptores de innumerables reconocimientos, tanto a nivel provincial como nacional.

Lo mismo sucedió con Diego Flores, Ayelén Martínez, Claudia Amura, Guadalupe Besso y Pablo Acosta, quienes durante los primeros días de agosto representaron a San Luis en el Campeonato Argentino de Ajedrez desarrollado en la provincia de Buenos Aires, que consagró como campeones a Flores y Martínez, integrantes de la Escuela de Talentos de la Universidad de La Punta.

Y en ese sentido, el gobernador Rodríguez Saá, acompañado por el vicegobernador de la Provincia, Carlos Ponce, el rector de la ULP, Fernando Salino, el ministro de Educación, Marcelo Amitrano, integrantes del gabinete provincial, como también diputados y senadores provinciales, distinguió a los representantes puntanos durante el día en que San Luis cumple 422 años desde su fundación.

“Adolfo Rodríguez Saá, el gobernador más grande del siglo XX, fue el creador de la ULP, imaginando una Universidad distinta pero motivada por las mejores universidades del mundo”, comenzó diciendo el jefe de Estado provincial en su alocución.

Tras hacer una breve reseña de las distintas eras por las que atravesó la civilización, el gobernador pidió “invadir San Luis con el mundo de la robótica”, atendiendo a que “hoy estamos viviendo la era de la robótica y nadie se da cuenta. Pero en San Luis sí, y es gracias a los chicos de La Punta”. Y agregó: “Todos van a empezar a hablar de la robótica y nosotros vamos a estar bien parados porque estamos viviendo en ese mundo; me llena de orgullo esta medalla que les estamos entregando porque nos están dando un mensaje del tiempo en el que estamos viviendo.

Seguidamente, Rodríguez Saá se dirigió a los jóvenes ajedrecistas haciendo un repaso histórico del juego ciencia, señalando sus experiencias como jugador, tales como sus partidas con Alfredo Ordóñez y los distintos certámenes nacionales en los que participó.

A su vez, recordó jugadores de nivel internacional como los hermanos Bolbochán y Erich Eliskases, como también lo hecho por Gilberto Sosa, Alejandro Buchaman y Ordóñez, o Héctor Lucero, quienes dejaron su huella en San Luis, siendo esto uno de los orígenes que derivó en Mundial de Ajedrez desarrollado en Potrero de los Funes durante el 2005 y que tuvo en su día de cierre a 50 millones de personas conectadas y atentas a lo que pasaba en la provincia.

“Así fue que comenzó a crecer el ajedrez en San Luis, tal es así que hoy en día hay más de 30.000 chicos jugando en nuestra provincia. Es un orgullo que hoy tengamos a los campeones argentinos; no se les puede pedir más”, aseguró el titular del Ejecutivo provincial antes de despedirse.

Una vez recibido el reconocimiento, el gran maestro Diego Flores subrayó que “me sorprende el entusiasmo que tiene el gobernador con el ajedrez; es una persona que transitó el camino que transitamos nosotros, entiende y sabe mucho, por eso que le preste tanta atención a lo que hacemos y nos reconozca de esta manera es algo maravilloso”.

Por su parte, Cravero y Queiroz agradecieron “por el apoyo recibido”, al mismo tiempo que invitaron a más jóvenes de su edad a que se sumen a la robótica “porque nosotros llegamos sin saber nada, todo lo aprendimos en la ULP”.

ANSL