Llamativa justificación para demoler una casa histórica sin autorización

El derrumbe de una vivienda precaria despertó opiniones encontradas en Villa de Merlo. El Municipio  denunció al propietario, Alberto José Fara, diputado provincial de Cambiemos, por demoler una casa que estaba protegida por su relevancia histórica. Fara aseguró que no sabía que la construcción, ubicada en las calles Poeta Agüero y Janson, estuviera incluida en una legislación y afirmó que la compró de buena fe.

El diputado provincial, Alberto Fara (UCR), afirmó que no sabía nada sobre la protección que existía sobre la casa que ordenó derribar para construir locales comerciales. “Compré ese terreno el año pasado y no tenía conocimiento de que la construcción estuviera protegido por alguna ordenanza. Me enteré por los medios de esto. Tengo documentación para demostrar que no incurrí en una violación en cuanto a la protección de ese lugar, hasta el momento no me han notificado nada formal”, dijo el legislador ante una consulta del diario de la República.

Fara especificó que en ese lote  había roedores, que entraba gente por las noches y que había riesgos de que se desplomara. “Ya se había caído una pared y comenzaron a ceder los techos. No es que fuese un bien protegido, estaba bastante desprotegido. Hablé con el dueño anterior y le pregunté si había sido notificado de esto, si hizo algún convenio con la Comuna, o incluso le pregunté si sabía que la Municipalidad hubiera destinado algún presupuesto para mantenerlo y me dijo que no”.

UN DOMINGO

El legislador del Departamento Junín explicó que tiraron abajo la construcción el domingo, porque “ya se había caído una pared, tuvimos que sacar parte de los techos, existía peligro de que continuara derrumbándose, y fue el único día que conseguí máquinas, estuvimos trabajando hasta las 11”.El propietario aseveró que iba a ir a la Municipalidad el lunes, “pero como nevó, todo el mundo andaba en otra cosa. Martes y miércoles estuve en la Cámara y hoy pensaba ir a denunciar, pero ya salió por los medios. Creo que esto tiene una connotación política”, expresó y agregó que la pared del frente estaba partida y podía caer en cualquier momento. Afirmó que la construcción era tan precaria que representaba un peligro para cualquiera que pasara por ahí.

Fara contó que en el lote tiene pensado construir un local. “Tengo negocios de ropa y calzados en el pueblo desde el 95”.

“El Municipio sabía que lo había comprado porque los impuestos llegan a nombre mío, y  no me notificaron nada. Fui comprador de buena fe, si yo hubiera sabido todo es muy probable que ni siquiera lo hubiera comprado”, concluyó

DOS VIOLACIONES

Las explicaciones de Fara resultan por lo menos llamativas. Como legislador y exfuncionario debería saber que para cualquier demolición de un inmueble se debe pedir autorización y presentar planos de obra, ante la municipalidad, como si se tratará de una obra nueva.

“La ordenanza Nº 757 del año 2000, incluida en el Código de Edificación, indica que para demoler es indispensable presentar los planos, antes hay que aprobar un proyecto de lo que van a sacar y lo que van a construir después, y no se hizo. Esa vivienda estaba incluida en una lista de la ordenanza Nº 60 del año 1995, que indica que estaba protegida por su relevancia histórica”, dijo el director de Obras Privadas de la municipalidad, Nicolás Rosatti.

La edificación pertenecía a Bocanegra, una de las primeras familias que habitaron la localidad. El funcionario especificó que además de elevar la denuncia al Juzgado de Faltas, adjuntó un informe al Concejo Deliberante. “Lo central es que no se puede remodelar, sí mejorar este tipo de estructuras, pero nada más. El propietario violó dos legislaciones. Aunque es cierto que muy poca gente sabe que existe este listado, los que viven hace muchos años acá sí deben saberlo”, afirmó.

Rosatti agregó que lo que le llamó la atención fue que la demolición se hiciera “un domingo, cuando estaba muy frío y no debe haber habido nadie en la calle; el dueño no nos preguntó, ni siquiera qué es lo que tenía que presentar en el Municipio para tirar abajo la construcción. Por eso consideramos que quizás él sabía que no podía tirar la construcción abajo. El martes a la tarde taparon todo como para que nadie mire. A los escombros no los han sacado, deben estar ahí”, detalló.

No es la primera vez que se realizan demoliciones de viviendas o inmuebles en Villa de Merlo, sin permiso. Hace pocos meses, propietarios del supermercado Top derrumbaron una casa antigua emplazada en un terreno ubicado en la avenida Norte. En esa ocasión también se actuó sin autorización municipal.

FUENTE: EL DIARIO DE LA REPUBLICA / REDACCION