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Denuncia penal contra el boliche Oasis

<p class="MsoNormal">Según se infor<a name="_GoBack" style="line-height: 19.5px;"></a>mó desde el municipio, en el boliche clandestino cobraban entradas y vendían alcohol sin permiso, ni habilitación. El domingo a la madrugada se realizó un megaoperativo y el municipio realizó una denuncia penal.</p> <p class="MsoNormal"> </p>
lunes 15 de diciembre de 2014
Denuncia penal contra el boliche Oasis

Según informaron desde el área de comunicación del municipio, suponen que en el lugar había menores. El operativo se realizó desde la madrugada y hasta el mediodía del domingo. El objetivo fue “detectar la realización de una fiesta en un espacio que funcionaba como “boliche clandestino” donde se cobraban entradas y se vendía alcohol sin autorización”.

“Además de labrarse las actas por incumplimiento de diversas ordenanzas, está en curso una denuncia penal por “desobediencia a la autoridad”, a fin de que intervenga el Juzgado Multifuero y se desaliente la actividad de este espacio donde se estaría lucrando sin permiso y sin cumplir medidas mínimas de seguridad”, expresa el comunicado de prensa.

Gracias a la denuncia de algunos vecinos se confirmó que se estaba realizando la convocatoria al evento “Oasis Sound” desde las redes sociales. La fiesta se realizó en un predio ubicado en calle Anselmo Tissera (entre Chumamaya y Los Nogales). “El operativo fue llevado adelante entre el Juzgado de Faltas, Bromatología, Tránsito y la Policía, constatando violaciones a las ordenanzas que regulan las Fiestas Privadas, Ruidos Molestos y Venta de alcohol”.

Según la Jueza de Faltas Emilia Zuásquita, pudo ingresar a la entrada del predio recién cerca de las 4 de la mañana. “Los titulares de este lugar decían que se trataba de una fiesta familiar y que tenían un amparo en contra de la ordenanza de Fiestas Privadas. Pero no presentaron ninguna documentación, y agendamos a muchos testigos que pagaron sus entradas”, explicó. Según se informó los encargados del lugar se negaron a apagar la música “incurriendo en el delito de desobediencia a la autoridad”.

“Es una situación gravísima por muchos motivos. Al no tener permiso ni habilitación, no podemos acceder a ver qué tipo de seguridad tienen. Hay muchos comerciantes que con gran esfuerzo están en regla y cumplen las ordenanzas. Hay vecinos perjudicados por estas actividades y por el ruido en un lugar donde no está permitido (el decibelímetro marcaba 80 db, cuando un boliche normal no puede superar los 60 db). Hay chicos y jóvenes que están corriendo el riesgo de enfrentarse a un Cromañón, y desde el Municipio vamos a trabajar con firmeza para evitar que esto ocurra”, añadió Zuásquita.

Desde la medianoche y hasta el mediodía del domingo trabajó también en la zona el personal de Transito junto con su director, Jorge Carrillo “para desalentar el ingreso de gente” y luego evitar que haya conductores alcoholizados a la salida de la fiesta. El parte indica que tras realizar los correspondientes controles de alcoholemia, se remitieron cinco vehículos. Durante el operativo también hubo personal de bromatología, junto a su director Carlos Serna. 

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