Mundial de Qatar
Argentina le ganó la final a Francia por penales: ¡Campeón del Mundo!
Como el final de una serie de varias temporadas, en la que el protagonista siempre parece que alcanza la felicidad total, pero siempre le falta algo. Y arranca una nueva y otra vez lo mismo. Esta vez, Lionel Messi le dio el cierre que se merecía y llevó a la Selección Argentina a la cima del mundo. Fue por penales. Fue sufriendo. Un cúmulo de emociones. Un tobogán enorme que no se supo dónde terminaba hasta el último suspiro. Fue 2 a 2 en los 90. 3 a 3 en el alargue y después, Dibu Martínez hizo su magia y la Scaloneta es campeona del mundo por tercera vez en su historia.
Con los rituales, propios, ajenos, del plantel, de las familias (con Antonella, Thiago, Mateo y Ciro a la cabeza) y de los hinchas, la Selección Argentina arrancó el primer tiempo con un planteo que sorprendió al entrenador Didier Deschamps. No por la presencia de Di María, que era una chance cierta en la previa que se confirmó instantes antes a la final, sino porque Scaloni puso a Fideo por la izquierda y no por la derecha como lo hace habitualmente cuando se calza la albiceleste. Y allá, desde el inicio, el jugador de las finales, el de los goles importantes, el de las revanchas, el del corazón hecho festejo, volvió locos a Dembelé y a Koundé, que no lo encontraron nunca.