“Abogo por el aislamiento porque entiendo que es la medida más efectiva para evitar la propagación”

Desde el 27 de febrero que había llegado a Malmö, Suecia con un permiso de residencia y trabajo. Estaba instalando allí como para empezar una nueva etapa de su vida. Al ver el avance del Coronavirus decidió volverse a Alemania (último país en el que había vivido) para pasar la cuarentena con su compañera chilena.  

Desde que dejó la argentina Fernando vivió en Segovia, España; Havnbjerg y Aarhus (ambas ciudades de Dinamarca); Leipzig, Mühlebeck y Landau in der Pflaz (las tres ciudades de Alemania), luego se mudó a Malmö, Suecia. “Acababa de llegar y no tenía a nadie así que cuando vi que empezaron a cerrar todo, decidí volverme a Alemania a hacer la cuarentena encerrado con familia”, dijo a Infomerlo.

Sobre la pandemia contó que allí “se empezó a vivir con cierta incredulidad, sobre todo el principio. Tengo amigos en Italia y cuando empezaron a hablar de la cuarentena no pensé que iba a ser así como lo está siendo ahora”, dijo.  

Hace algunas semanas que los planes de Fernando, como los de muchos, se vieron afectados completamente por la pandemia. Según contó a Infomerlo días atrás lo primero que tomó como señal fue el cierre de la frontera de Dinamarca. “Me mudé a Malmö y está directamente conectado con Copenhague, de hecho la forma más fácil de ir a Malmö, Suecia es aterrizando en Copenhague y cruzando el mar en tren o en lo que fuera”, contó.

“El cierre de Dinamarca me afectó directamente. Fui a Berlín para pasar un fin de semana en familia y en ese mismo fin de semana primero tuve que cruzar a Copenhague la noche anterior y pedir que me hospeden porque sabía que si esperaba, en la mañana siguiente iba a ser caótico y me iba a quedar del otro lado de la frontera. Crucé apurado a Copenhague y desde ahí volé a Berlín en un aeropuerto muy desierto, el vuelo también estaba completamente vacío. Se notaba que era una situación extraordinaria. En las calles de Copenhague también había muy poca gente y eso que fue el primer día del cierre de las fronteras (14 o 15 de marzo), ya en Dinamarca había una conciencia de quedémonos en casa”, contó.

CASOS CERCANOS

“En Malmö justo antes de venir en hubo siete casos. Es muy rebuscado, pero es como que uno empieza a hacer estas asociaciones y empieza a tomar conciencia de lo fácil que es la propagación. Uno de los casos se originó en el lugar de trabajo del compañero de una amiga, de mi compañero de cuarto. Como que en tercera instancia no fue mi compañero de cuarto, ni su amiga, sino el compañero de su amiga que asistió al lugar de trabajo donde hubo un caso, entonces esos tres ya están en cuarentena”, explicó.

PASAR LA CUARENTENA ACOMPAÑADO

“Estoy en Landau in der Pflaz es una región que está cerca del foco con mayor infección de Alemania, medio paradójico lo mío. Estaba en Suecia que estaba medio controlado y me vengo a Alemania donde está más cerca de Francia y de España, la situación es un poco más compleja pero prioricé pasar el aislamiento en familia antes que estar solo en un lugar nuevo”, aseguró.

En cuanto a la situación económica Fernando contó que está tratando de dar sus clases de español via Skype. Con esta situación “mis ingresos se ven completamente afectados, aun así abogo por el aislamiento porque entiendo que es la medida más efectiva para evitar la propagación”.

En el pueblo cerraron la facultad “que es el principal motor acá de todo lo que se mueve”. Dijo que en las calles hay poca gente y todos mantienen el distanciamiento social obligatorio, “todavía no hay una restricción total a la circulación”. “Se puede salir teniendo recaudos. Hay gente sale a hacer deporte, a pasear el perro... se lleva una vida muy normal, hay mucho menos movimiento en las calles pero no es una cuarentena forzada ni penada con multas por ahora en este pueblo de Alemania”, finalizó.