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Desaparición y misterio

Caso Delia Gerónimo Polijo: cinco meses sin respuestas

Desde septiembre de 2018 nada se sabe de ella. Desapareció tras salir del colegio, de regreso a su casa, en La Paz. Su familia pide que no cese la investigación. La muerte de un sospechoso disparó más dudas.
lunes 18 de febrero de 2019
Angustia
Los padres de Delia no cesan en su pedido por la desaparición de su hija. La Voz.
Los padres de Delia no cesan en su pedido por la desaparición de su hija. La Voz.

Mario Gerónimo (45) pensaba regalarle a Delia, su hija, un collar con el número 15 para celebrar su cumpleaños. Lo dice en voz alta y traga saliva. “Cada vez que lo pienso, me pongo triste”, dice, con los ojos vidriosos. Ayer, además del aniversario del natalicio, se cumplen cinco meses de la desaparición de la adolescente, quien fue vista por última vez el 18 de septiembre de 2018, cuando regresaba del colegio hacia su casa en el paraje La Guarida, a seis kilómetros de La Paz, en el Valle de Traslasierra.

Desde ese día, la familia Gerónimo Polijo comenzó a vivir una pesadilla y los pocos avances que hubo en la investigación motivaron a un grupo de vecinos a insistir con la búsqueda de Delia a través de marchas. Todos los martes y sábados, se reúnen a las 21 en la plaza de La Paz para mostrarle a la comunidad que ellos se siguen preguntando: “¿Dónde está Delia?”.

“Vecino, vecina, no sea indiferente, se llevaron a Delia en la cara de la gente”, cantan al unísono los habitantes que se movilizan por la plaza ante la mirada atenta de numerosos turistas. A cinco meses de la desaparición de Delia, no hay una imputación formal y los vecinos aseguran que hay “destrato” por parte de las autoridades locales.

PUNTO DE PARTIDA

El día que Delia desapareció, el colegio al que concurría había liberado a todo el curso antes del horario de salida. La adolescente iba a segundo año, por la tarde. Eran las 16 cuando emprendió el regreso hacia su casa por la ruta provincial 205.

“El colegio siempre notificaba en el cuaderno de comunicaciones cuando los iban a dejar salir antes. Ese 18, Delia no estaba autorizada a salir de la escuela”, cuenta Mario, y Modesta agrega: “Como nosotros trabajamos en los cortaderos de ladrillos, siempre la veníamos a buscar. La esperábamos en la esquina de una farmacia, a tres cuadras del Ipem”.

El 18 de septiembre, a las 18, los Gerónimo Polijo enviaron a Cristian (el hermano mayor de Delia) a buscarla al colegio. Cuando el muchacho llegó en moto al establecimiento, ya no había nadie. La escuela estaba cerrada. Preocupado, volvió por la ruta y retornó a la casa, ubicada en el cortadero de ladrillos.

Delia nunca regresó a casa. Ya desesperado, el joven retomó la búsqueda. No hubo caso. La adolescente había sido elegida por sus compañeros para ser la reina del Día del Estudiante.

En un principio, su madre pensó que podría estar en la plaza ensayando con sus amigas o en el club, aunque sabían que Delia no era de ausentarse de su casa sin avisar.

“Mi hija iba a todos lados conmigo, no era una chica de andar sola e ir con otras personas sin avisar”, detalló Modesta. Ante la desaparición, el padre radicó la denuncia el mismo 18 de septiembre a las 20.

“LA POLICÍA TRABAJÓ MAL”

A cinco meses de la desaparición, los Gerónimo Polijo sostienen que la Policía hizo mal las cosas. Los vecinos agregan que algunas autoridades hacían correr el rumor de que la chica se había ido por su propia voluntad.

“A mí, los policías me apuraban. Me preguntaban qué pensaba yo sobre el paradero de mi hija”, reflexiona Mario, y añade: “Nosotros conocemos de punta a punta a Delia. Ella no tenía ese carácter. Era una chica que sólo conocía La Paz. Siempre estaba pegada a nosotros”.

Durante más de tres meses, la búsqueda de Delia se mantuvo en la memoria por medio de la voluntad de los vecinos que empapelaron todo el Valle de Traslasierra con la cara de la chica.

MUERTE Y MÁS MISTERIO

Una denuncia por violencia de género por parte de una vecina de Delia, el 23 de diciembre de 2018, produjo un vuelco en el caso. Para muchos, eso puede ser el principio del fin del misterio que lleva meses.

Cansada de la violencia, la mujer dijo que Mauro Martínez (27) la había amenazado de muerte, y que estaba relacionado con la desaparición de la jovencita.

Ese mismo día entregó en la comisaría de La Paz una cadenita con un corazón partido y otros elementos. La cadenita era de Delia, según confirmó Mario Gerónimo. Cuando la Policía llegó a la casa, Martínez ya no estaba.

Tras una intensa búsqueda, fue hallado colgado de un árbol en medio del monte. Martínez tenía dos hijas y vivía en el paraje La Guarida, cerca de la familia Gerónimo Polijo. Alguna vez supo trabajar haciendo changas en los hornos de ladrillo del lugar. Recientemente había ingresado a trabajar en la recolección de residuos de La Paz. Tenía antecedentes por lesiones graves.

En julio de 2018 había herido con un cuchillo a un amigo. Pertenecía a una familia que para muchos vecinos de la zona aparece como problemática. Incluso, algunos sostienen que en el pueblo contaba con apoyo político, ya que sabía juntar votos.

En este marco, no son pocos los vecinos que se quejan del intendente Gustavo Hachuel. Afirman que no se acercó a hablar con los padres de Delia. Tampoco fue posible hablar con él.

La muerte de Martínez abrió muchos interrogantes en torno a Delia. Aún no hay respuestas. Los intentos para contactar al fiscal de la causa, Raúl Castro, no dieron resultado.

Mario y Modesta aseguran que sus hijos no tenían contacto con el hombre que se mató, pese a vivir a metros. Con el correr de los días, y la falta de respuestas en la investigación, sus hipótesis empezaron a ser cada vez más escalofriantes.

“No dejamos de pensar ni un minuto en nuestra hija”, dice emocionado Mario. “Los vecinos saben que estamos preocupados. No hay ninguna noticia, nada”, se queja.

Con un georradar, efectivos de Gendarmería analizaron pozos en campos próximos a la zona donde desapareció Delia. Es un terreno conocido por Martínez. Se espera su informe en unos 20 días.

$ 200 MIL DE RECOMPENSA

El dinero fue ofrecido para quien aporte datos clave.

Ofrecimiento. Con la venia de la Fiscalía, el Gobierno provincial puso a disposición una recompensa de 200.000 pesos para quien pueda aportar datos concretos que permitan dar con el paradero de Delia Gerónimo Polijo.

Dónde llamar. Ante cualquier información, se puede llamar a la Unidad Judicial de la ciudad de Villa Dolores (03544-424778), a la comisaría de La Paz (03544-496600), a la dependencia policial más cercana o al 101 de la Policía. Otro número es el 0810-888-3368.

(la voz / redacción)

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