Por unanimidad y con aplausos fue aprobada la Semana del Estudiante

Los jóvenes de las escuelas de Villa de Merlo recuperaron por ordenanza un derecho: festejar la Semana del Estudiante. Ayer, los concejales aprobaron por unanimidad la legislación por la cual se crea este espacio de celebración y reconocimiento en la etapa de formación durante la secundaria. La nueva ordenanza fue aplaudida por alumnos que presenciaron la sesión, pero que también defienden sus derechos, a través de otras iniciativas que han sido presentadas a los ediles.

El edil de Avanzar y Cambiemos, Matías Herrera, recordó que la ordenanza sobre la creación de la Semana del Estudiante fue presentada por ese bloque político en septiembre de 2016 y tenía como antecedente el pedido que hicieron alumnos de la escuela EMEI en agosto de ese año durante una exposición en la Banca del Vecino.

Herrera resaltó el compromiso de los jóvenes con sus derechos, que el festejo "no será un día sino más jornadas", en las cuales se busca que los alumnos de escuelas secundarias se integren a través de diferentes actividades. Además, destacó el trabajo legislativo de los integrantes de la Comisión de Gobierno.

El concejal Gastón Fonseca (Unidad Justicialista) también puso en relieve el compromiso de los jóvenes merlinos y felicitó a las concejales Ana Orlando y María Rosa Miravet, que con su contribución en la redacción final de la ordenanza la hicieron viable. La concejala Orlando (Avanzar y Cambiemos) dijo que el eje de la ordenanza es la “cooperación entre los alumnos y no la competencia” y al igual que sus pares destacó la participación de los jóvenes y la manera en que se involucran para defender sus derechos.

El edil Juan Alvarez Pinto (Avanzar y Cambiemos) aseguró que la nueva ordenanza es “una conquista de los jóvenes”, a la que calificó de “despierta y movilizada”. Al igual que el edil Herrera recordó los hitos fundacionales de la legislación en el 2016, reconoció que el municipio a través de la secretaría de Cultura había trabajado muy bien con algunas actividades para los jóvenes y dijo: “más que crear que la semana del estudiante, la estamos recuperando”.

La concejala María Rosa Miravet (Unidad Justicialista) recordó que la Semana del Estudiante en Villa de Merlo se había perdido por la “desinteligencia de los adultos”, en relación a la visión parcializada de algunos directivos de escuelas de Merlo que preferían festejos en sus propios colegios, por encima del conjunto. Miravet también destacó la “integración” como uno de los pilares de la ordenanza.

La edil Gabriela Mancilla (Avanzar y Cambiemos) enfatizó que en la legislación están comprendidas todas las escuelas de Villa de Merlo, públicas y privadas, como también la escuela municipal Mirlo, a la cual asisten alumnos con capacidades diferentes. El edil Leo Rodríguez (Avanzar y Cambiemos) destacó al igual que otros ediles, la labor de las concejales Orlando y Miravet en el “pulido” de la redacción de la ordenanza y dijo que por delante está el desafío de aprobar el boleto estudiantil.

El presidente del Concejo Deliberante, Edgar Amaya (Unidad Justicialista) cerró las exposiciones, felicitó a los alumnos y dijo que ahora se debe trabajar para que la Semana del Estudiante se concrete con responsabilidad para que se sostenga en el tiempo.

Después, la ordenanza se puso a votación. Se aprobó por unanimidad y hubo aplausos de los jóvenes y los ediles. La normativa establece que el Ejecutivo Municipal convocará a los estudiantes para la organización.

La aprobación de la ordenanza se logró por un acuerdo de los dos bloques de concejales, en una labor de convivencia política y de aportes para mejorar el proyecto original. El trabajo en conjunto se vio reflejado en el recinto, donde prevaleció un clima de cooperación, que es el que los ediles le reclaman a los jóvenes para la Semana del Estudiante.

Ayer, además de ampliar los derechos de los jóvenes, quedó demostrado que cuando los concejales no se dejan atrapar por los demonios políticos del pasado, puedan consensuar importantes proyectos. Cuando eso no ocurre, y ocurrió muchas veces, el debate en el recinto se parece más a la Caldera del Diablo.