El ojo del tiempo: parte de la historia del reloj de sol

El reloj de sol está ubicado en una plazoleta frente al Casino Dos Venados, fue diseñado por el artista plástico Pérez Célis. Se destaca por sus grandes dimensiones y variados colores, también llama la atención por su forma y su precisión al dar la hora. La obra llevó un año y medio de construcción y un destacado estudio astronómico que estuvo a cargo de Jaime García.

El destacado astrónomo vive actualmente en Rama Caída, una localidad ubicada 15 kilómetros al sur de San Rafael, Mendoza. El programa Mejor los sábados, que se emite por Radio Mega entrevistó a García, quien compartió su amor por la Villa de Merlo y detalles de la obra. García conocía Merlo desde sus 8 o 9 años. En ese entonces vivía en la ciudad de Córdoba y su padre tenía un emprendimiento en las sierras. “Hemos ido a pasear con él. En ese tiempo, durante el año 65’, la Villa de Merlo era como el casino de Córdoba, donde no estaba permitido el juego. En San Luis sí, entonces toda la gente que iba a las sierras, viajaba a jugar a Merlo que era un pueblito ínfimo en aquellos tiempos”, recordó García durante la comunicación con Mejor los sábados.  

Varios años más tarde le llegó la propuesta para construir el reloj de sol. “Me contactaron porque alguien sabía que yo había hecho relojes de sol”, indicó. “La idea era hacer un hito turístico”, para eso junto al arquitecto viajó a conocer al artista Pérez Celis y asesorarlo en cuanto al tema. Luego de mucho trabajo en conjunto, el artista más adelante le mostró una maqueta en madera, hecha Guillermo Agostini. Luego la obra sufrió algunas modificaciones para garantizar el correcto funcionamiento del reloj. Al proyecto se sumó un segundo reloj vertical de dos caras y un recorrido en el piso con las líneas de los trópicos para que indique en que época del año se está. “Es un reloj y un calendario”, remarcó. Entre las anécdotas que dejó la experiencia, García recuerda que el primer día que fue a realizar mediciones del meridiano local, en el momento de hacerlo el cielo se nubló. Eso obligó a que tengan que modificar luego la obra para su correcto funcionamiento.

La obra se inauguró el 11 de enero de 2007. “Lamentablemente Pérez Celis no pudo estar en la inauguración, se enfermó mucho. Yo fui con mi familia y pasamos unos días en la Villa de Merlo, un lugar del que estuve enamorado siempre”, expresó García. Desde entonces el reloj es visitado por miles de turistas al año, y se convirtío en otro de los atractivos de la ciudad. 

EL OJO DEL TIEMPO

El monumento se denomina El Ojo del Tiempo, dada la forma de uno de los dos relojes que lo componen, el vertical de doble faz. El otro reloj es horizontal.

Las dimensiones de ambos relojes son muy grandes. El diámetro del cuadrante del horizontal supera los 16 metros y el vertical es una placa de 10 metros de longitud montada sobre dos pilares que llegan a una altura de 23 metros.