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Movidas hacia el 2017

Disgustado por el faltazo, el Gobierno enfrentará en las urnas a Rodríguez Saá

Fortalecerá la alianza Cambiemos en San Luis como respuesta a la ausencia del gobernador el 9 de Julio. Buscan que el exgobernador, Claudio Poggi, integre ese espacio. El jueves, Poggi compartió una comida con dirigentes del PRO puntano.
domingo 17 de julio de 2016
Juntos
El gobierno nacional quiere a Poggi para enfrentar a los Rodriguez Saá.
El gobierno nacional quiere a Poggi para enfrentar a los Rodriguez Saá.

Todavía sin reponerse de la sorpresa por el inesperado faltazo, en el Gobierno ya piensan en una respuesta política. Sin hacer sonar tambores de guerra ni romper los lazos que aún existen, la Casa Rosada comenzó a prepararse para enfrentar en las urnas al gobernador de San Luis Alberto Rodríguez Saá , quien sin avisar -ni enviar reemplazante- faltó el 9 de Julio a la histórica firma del pacto del Bicentenario en Tucumán .

En el Ministerio del Interior, que encabeza Rogelio Frigerio , reaccionaron rápido: días después de la ausencia del gobernador puntano, comenzaron a hablar de "fortalecer Cambiemos" en San Luis de cara a las elecciones legislativas del año próximo, donde se renovarán tres bancas de senador y otros tantos diputados nacionales. 

El fortalecimiento de la alianza demanda, por cierto, la incorporación de un jugador clave: el ex gobernador Claudio Poggi, que a principios de año oficializó su divorcio con el poder bifronte que componen el gobernador y su hermano mayor, el cinco veces gobernador, ex presidente y actual senador Adolfo Rodríguez Saá. El jueves hubo una señal clara: Poggi fue invitado a compartir una comida con dirigentes del PRO puntano.

La idea, afirman en Casa Rosada, es "aumentar la representación legislativa" de Cambiemos, que hoy alcanza a un solo diputado nacional, el radical José Riccardo. El diputado, que enfrentó a Alberto Rodríguez Saá en las elecciones de octubre del año pasado, quedó posicionado para encabezar la oposición puntana, aunque su rival interno, Walter Ceballos -hoy secretario de Planificación en el Ministerio de Defensa- también se anota para la contienda.

Sectores del radicalismo puntano creen que hay que acelerar ya. "Entiendo que a veces hay que aceptar las extorsiones, pero si queremos construir un cambio en la provincia, con respeto a las instituciones y un aire nuevo para la política, no es con los Rodríguez Saá que lo vamos a hacer", afirmó Ceballos, candidato opositor derrotado por Adolfo Rodríguez Saá en 1999, a LA NACION. "Cada peso que se les da desde el Gobierno les alarga la vida política", agregó otro radical que pide enfrentarlos de manera directa.

Mientras sostiene buenos vínculos con sectores del Gobierno, que incluyen al propio presidente Mauricio Macri, Poggi hace su juego. En marzo, el ex gobernador (2011-2015) renunció al bloque del PJ puntano y armó un monobloque; también dimitió a la vicepresidencia del PJ San Luis; y formó un nuevo partido, Avanzar, con el que pretende dar batalla en las elecciones legislativas de 2017 (podría ser candidato a senador) y las provinciales de 2019. Como era de esperar, los Rodríguez Saá lo acusaron de "traidor", de desagradecido", y hasta de mal administrador, pero él está convencido de ser la punta de lanza de un cambio real en la provincia.

"Poggi va a tener que decidirse. O hace la heroica solo y pierde, o juega con nosotros", afirma un funcionario con conocimiento del terreno puntano. El ex mandatario, sin perder la calma, sólo concede que "con Riccardo estamos trabajando bien juntos", pero no se muestra apurado por acordar con Cambiemos. "El que manda respeta sus tiempos", aseguran cerca del diputado nacional.

Mientras tanto, y lejos de arrepentirse por la ausencia, los dueños del poder puntano desde 1983 redoblaron la apuesta. "Al Presidente le está faltando un plan. Jugar todas las fichas del país a las inversiones extranjeras y a endeudarse es una zoncera", afirmó el gobernador el martes, y reiteró que el documento firmado por los gobernadores en Tucumán "era muy lavadito".

En el Gobierno ponen paños fríos. Insisten en que habrá, pronto, visitas de Frigerio y el propio Macri a San Luis. Mientras tanto, preparan una respuesta en las urnas al histórico desplante en la Casa de Tucumán.

REDACCION / LA NACION

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