Fue preso por abusar de una hija e investigan si violó a otra

Un caso de violencia de género dejó al descubierto dos episodios de suma gravedad, cometidos a escondidas y cuyas víctimas sufrieron abusos sexuales. El sospechoso ahora está preso porque la investigación judicial que iniciaron contra él por agresión develó que habría abusado de dos de sus hijas.

El juez Penal del Departamento Junín, Jorge Pinto, lo procesó por el abuso sexual simple, sin acceso carnal, de una adolescente de 15 años. Y lo investiga por la presunta violación de una hija mayor, que habría ocurrido hace cinco o seis años. La develación del caso conmueve los cimientos de una familia de Santa Rosa del Conlara, que ya sufría por las reacciones violentas del padre.

A fines de enero, una de las hijas denunció que el hombre la golpeaba. Él había quedado a cargo de la descendencia porque su esposa, la madre de los chicos, se había mudado a vivir en otra localidad del Valle del Conlara, donde tiene parientes, al parecer porque se había cansado de sufrir violencia de parte de su marido.

El juez Pinto, que en ese momento estaba a cargo, como subrogante, del juzgado de Familia y Menores, ordenó que excluyeran del hogar al presunto padre golpeador, que debía, no obstante, pasarles la cuota alimentaria a sus hijos. Y como ellos manifestaron miedo a que él tomara alguna represalia, dispuso que la Policía vigilara la casa y les proveyera botones antipánico.

Como parte de esa investigación, el magistrado decidió que una psicóloga del Poder Judicial entrevistara a una hija menor del acusado, de 15 años, para que aportara datos sobre los maltratos a sus hermanos y contestara, de paso, si ella también había sido golpeada. La adolescente dijo que no, que su padre no le pegaba. Pero que abusaba de ella. Relató manoseos y propuestas para que accediera a tener relaciones sexuales con él. Tras esa revelación, que la menor confirmó luego en una serie de entrevistas a través del sistema de Cámara Gesell, el juez ordenó detener al presunto abusador. El hombre, que no es albañil pero trabaja en obras de construcción, fue llamado a declarar en indagatoria, pero se abstuvo. El informe del examen psicológico a la chica fue uno de los pilares en los que, más tarde, Pinto sustentó su resolución de procesar al hombre y dictarle la prisión preventiva. “El relato de la niña es sólido y se condice con el contexto familiar”, reveló una fuente de la investigación. El caso no terminó allí.

BEBE

A raíz de la revelación que hizo la adolescente, una hermana mayor, de 23 años, contó que años atrás su padre la habría violado. Y que a raíz de ese abuso ella quedó embarazada y tuvo un bebé, pero él la obligó a desprenderse del chico. Una referencia al destino irregular de esa criatura sería una causa penal que habría tramitado años atrás en el juzgado Penal de Concarán, pero en ese expediente no habría ninguna mención a que el bebé habría sido el fruto de una violación, refirió una fuente judicial.

fuente: el diario de la República